Francya Castro: El día en que la cultura murió: Rememorando un 11 de septiembre

Ya hace treinta nueve años que por primera vez en la historia se elegiría el primer presidente socialista democráticamente, y así mismo se crearía una profunda cicatriz en la memoria colectiva muy difícil de sobrellevar. Y es porque si bien en aquel día no se desató una catastrófica guerra civil, fué un holocausto para muchos intelectuales que de haber sobrevivido, Quizá hubieran cambiado el paupérrimo destino cultural y social de Chile, el destino de la sociedad de consumo y la tajante inconciencia de los jóvenes y mandatarios que impiden hacer un país distinto...uno mejor.

En las veredas no es posible encontrar agentes de la CNI o vestigios de la DINA en sus más variados centros de tortura como fueron en aquellos tiempos donde transeúnte inocente eras y de todas formas te explotaba la bomba en la cara pero sin lugar a dudas, en la actualidad, el obrero no luce de aquel libro que solía leer en su banca y la clase trabajadora absorta en el televisor, no sabe lo que en realidad está sucediendo en su nación, la verdad incómoda.

No hace mucho en un pasado viernes, hice una visita al Museo de la Memoria de Quinta Normal, recinto que en lo posible se esmedra en recopilar toda información relacionada con los desaparecidos y torturados durante el período de dictadura, y que además genera conciencia a todos sus visitantes a través de enriquecidas visitas guiadas donde podremos por medio de videos, obras artísticas, testimonios, documentos de prensa, imágenes y demases, crear ideas globales sobre lo ocurrido. Esto es de una importancia grandísima, ya que nuevas generaciones podrán enterarse más cercanamente la profunda herida histórica y sus repercusiones en la actualidad y no dudo que en más de alguno surgirá la iniciativa por obrar, por un mejor Chile.

Personalmente, para mí la experiencia fue maravillosa pero intrigante a la vez. Maravillosa porque logró tocarme los inmesurables testimonios de sobrevivientes y familiares que hasta el día de hoy luchan, porque se haga justicia de los crímenes cometidos hasta bajo sospecha(en eso vimos el caso de una mujer viuda que todos los días junto con su amiga, viuda también, iban a dejarle rosas y claveles a sus maridos en el césped frente al palacio de gobierno, claveles que luego eran retirados por carabineros sin mensionar que no las dejaban transitar en la vía pública), la impotencia puede ser más grande sabiendo que muchos culpables, luego de La Ley de Amnistía, están ahora en cargos importantes de seguro, sin pisca de arrepentimiento. También Intrigante por la irracional humillación y violencia desquiciada que sólo podría concebir una mente enfermisa(luego vería entrevistas de torturados en donde les hacían sangrar sus genitales y pezones, bañarlos en aguas heladísimas forma conocida como el "submarino" y atarlos a una camilla de fierro para ser fuertemente electrocutados). Una de las secciones más conmovedoras fué la de los niños, en las que fueron expuestas cartas de algunos chiquillos hacia algunos mandatarios por la desaparición de sus familiares y dibujos con cánticos en contra del actual gobierno de entonces.

No me queda más que invitarlos a este espectacular museo que además de visitas, tiene talleres reflexivosy biblioteca. También las visitas se pueden solicitar.

Lo recomendable sería también llevar de visita a niños y jóvenes para que desde muy temprana edad, aprendan sobre la importancia de los derechos humanos. La entrada es completamente gratuita y se puede obtener más información sobre horarios y ubicación en la página principal del museo:

www.museodelamemoria.cl

Por último les dejo una videopoesía relacionada con los tiempos del plebicito del NO a modo de protesta de como el mundo "que nos prometían, no fue tan como parecía", pero expresado artísticamente por el poeta Mario Celis en andanzas por el cerro Chena y Maestranza con hallazgos simbólicos. Esto fue editado por Marcelo Mallea junto con las 525 lineas de videopoesía, donde poetas sanbernardinos exponen esta innovadora y dinámica propuesta en conjunto con los versos, las imágenes y la metáfora potente. Mario Celis, desde hace mucho interesado en la poesía social y autor de "Microinvisible", en esos años aún era adolescente y sin indicios de haber publicado obras. Actualmente se vincula a la ecología y trabaja en un proyecto relacionado con la historia de San Bernardo.